De los adjetivos calificativos y otras cuestiones

DE LOS ADJETIVOS CALIFICATIVOS Y OTRAS CUESTIONES

A diario nos topamos con lecciones antiguas, algunas aprendidas en casa, otras en la escuela.

Hoy me encontré dentro de mi profesión en la búsqueda de una palabra que definiera una disposición gubernamental. Naturalmente, como siempre que evaluó al gobierno termine pensando en otra cosa, viste que no me gusta pensar en mierda.

Así que viajé a esas etapas gratas que me brindaron las evaluaciones femeninas que en algún momento me hicieron, encontrándome con un adjetivo complejo e incomprensible con el que intentaron definirme al menos dos veces.
Esta polisemia a la que tuve que hacer frente me tomo por pendejo, pues como buen idealista siempre pensé en el significado positivo de aquel adjetivo calificativo, hasta me subió el ego, comencé a pensar que escribía bárbaro, éramos Oliverio, Julio, Jorge Luís y después yo, que pelotudo que puede llegar a ser un mal lector como yo, pues nunca me di cuenta que aquellos monumentos femeninos que intentaron definirme lo hicieron apropósito con una homonimia, pues cuando me dijeron que era increíble, no estaban afirmando que era una persona que no se encontraba en muchos sitios, que les gustaba mi modo de ver el entorno y claro el modo de manifestarlo, que encontraron en mí un detalle común, pero distinto; no, no fue por eso, por el contrario el increíble, respondía a una concepción de mi, que de un modo fugaz, cruel y por supuesto tierno; me definía como un boludo que no sabe donde esta parado.

En fin si esas espectaculares mujeres hubiesen querido ser directas y no poetas conmigo, hubiesen dicho algo muy parecido a "¿en que estas pensando?, es increíble que te arriesgues, ¿no intuiste que no me interesa?"

Por esto, estimados compañeros, tomen en cuenta esta humilde recomendación, vuelvan a la primaria, repasen literatura, lean uno que otro libro y después lean lo que les escriben esas espectaculares mujeres que los rodean.

JEM